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¿Y ahora qué hago?

26-02-2024

Ha llegado la edad en la que ya es tiempo de jubilarte o retirarte de la vida laboral, esta va a variar de acuerdo a la actividad a la que te dediques; generalmente es entre los 60 y 65 años.

Es una etapa para la que si no nos preparamos puede ser muy conflictiva ya que a esa edad no solo afectan aspectos emocionales y psicológicos, sino también económicos, físicos y de salud.


Por lo tanto, lo más importante es prepararnos para ese momento tomando en cuenta la edad aproximada del mismo, mientras más tarde sea, hay más tiempo para prepararse, a menor edad hay que iniciar más temprano.


Como prepararnos para el retiro o jubilación:


1.- Financieramente: La seguridad financiera no ocurre por sí sola, se necesita planificación, compromiso y desde luego dinero. Por esta razón es importante ahorrar, de no contar con un plan de jubilación gubernamental, es necesario recurrir a uno privado en una institución confiable, con el asesoramiento necesario para ayudar con los aportes para la pensión; estos deben estar acordes a lo que te gustaría hacer una vez retirado.

2.- Cuida tu salud: procura tener un chequeo médico anual para prevenir cualquier enfermedad futura y de tenerla es importante considerar ese gasto en la planificación financiera.

3.- Psicológicamente: Según la American Psychological Association, los jubilados o retirados pueden clasificarse, a grandes rasgos, en seis grupos:

a.       Continuadores: Buscan seguir utilizando sus habilidades y conocimientos mediante trabajos a tiempo parcial o voluntarios.

b.       Aventureros: Empiezan actividades o aprenden habilidades completamente nuevas, no relacionadas con su trabajo anterior.

c.       Buscadores: No deciden su identidad antes de jubilarse o retirarse, sino que experimentan durante los primeros años y buscan actividades adecuadas a sus gustos e intereses.

d.       Despreocupados: Disfrutan de la ausencia de rutina y de la abundancia de tiempo libre, dejándose llevar en su día a día.

e.       Espectadores involucrados: Mantienen un interés elevado en su campo de trabajo anterior, pero sin desempeñar un rol profesional.

f.        Retraídos:  No logran encontrar actividades acordes a sus intereses y se dan por vencidos, llegando incluso a caer en depresión.


Recomendaciones para afrontar psicológicamente el retiro o jubilación:


1.       Analizar los sentimientos propios de cara a la jubilación o retiro.

2.       Exponer dudas y planes ante la familia cercana y el círculo de amigos.

3.       Plantear las actividades a las que nos gustaría dedicarnos.

4.       Reforzar los vínculos sociales.

5.       Marcar unos objetivos de vida saludable


El trabajo supone una parte muy importante de nuestra rutina y abandonar la vida laboral puede no ser tan sencillo, de allí la importancia de prepararnos para ese momento.

 

 

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