Por: Nancy John
Periodista
Hola queridos lectores, regresé para acompañarlos en una temporada que para la humanidad es linda y muy emotiva en general, pero para quienes hemos perdido a un ser querido puede llegar a ser abrumadora.
Recuerdo la primera navidad que vivimos luego del fallecimiento de nuestro hijo, la verdad no pensaba nada, no quería pensar en que íbamos a hacer; las celebraciones de navidad y año nuevo por costumbre se celebran en familia y están cargadas de tradiciones que vamos creando en cada núcleo familiar, son festividades con un alto contenido emocional.
Pues esa primera navidad en nuestra casa no hubo árbol, ni adornos, no se encendió el horno…en resumen salimos del país por esa época a casa de unos buenos amigos en Estados Unidos, como huyendo, tratando de creer que cambiando de lugar las cosas iban a ser diferentes, pero hasta ese momento no nos habíamos percatado que el dolor y la tristeza viajaron con nosotros.
En mi caso han pasado 4 años y no hemos puesto árbol en casa y las celebraciones ahora las hacemos en casa de mi hijo mayor rodeados de nuestras nietas, pienso este año decorar un poco para que la casa se ilumine como hace cuatro años atrás, estoy segura de que así quisiera mi hijo que lo recordáramos, así podemos honrar su memoria.
Leyendo un poco por aquí y otro tanto por allá y sumado a lo que he vivido puedo darles algunos consejos que harán más llevadera esta temporada…
La celebracion de la navidad puede esperar a que estes listo para compartir, no hay prisa, primero esta nuestra salud emocional, estas procesando un duelo y según como te sientas, tú decides con quienes reunirte o no hacerlo, si quieres hacer compras o no, adornar la casa o no.
Debemos tener presente que la navidad ya no será la misma, no pretendas celebrar como si nada ha pasado, ahora bien, cuando estes listo podrás si así lo quieres crear una nueva forma de celebrar, como colocar un adorno que recuerde a nuestro ser querido, de esta manera vas a integrar su ausencia no con tristeza si no con recuerdos agradables que llenaran de paz tu corazón y el de tu familia.
Leí por ahí que el duelo es como el mar unas veces esta en calma y otras sus olas azotan con fuerza, y estamos ahí en medio, con el tiempo vamos aprendiendo a nadar, a sortear con sabiduría y fortaleza esas olas, no podemos quedarnos estáticos contemplando nuestro dolor el movimiento nos hace avanzar y la calma nos abrazará.
Es una época en la que podemos compartir ese amor que ya no podemos entregarlo físicamente a nuestro ser querido, hacer algo amable con alguien más, un voluntariado, por ejemplo, compartir con alguien que necesite de ayuda, inténtalo, todo regresará a ti con mucha paz y satisfacción.
Algo que aprendí es que volver a sonreír, a disfrutar con la familia y amistades, no significa que ya olvidamos a la persona que ya no está, estoy convencida de que donde este mi hijo se alegrará de vernos felices, recordándolo con amor.
Encontré un articulo sobre este tema y me gustaron tres sugerencias que podríamos poner en practica, una de ellas es crear una caja de memorias, vas a poner la caja en un lugar especial, junto a papel y lápiz y todo el que visite tu casa durante la temporada o ese día de navidad escribirá un recuerdo agradable sobre la persona que ya no esta entre nosotros y luego los leerán juntos, esto reemplazará la tristeza por un momento inolvidable.
La segunda sugerencia es comprar un regalo para tu ser querido, debe ser algo que a él o ella le hubiese gustado, que refleje su personalidad o su interés y luego lo donas a alguien que lo necesite, con esto podemos lograr mantener viva su memoria en estas fiestas y el acto de dar a quien necesite nos brindará satisfacción y paz.
Y la tercera contar nuestras bendiciones, toma tu tiempo y encuentra esas cosas por las que estas agradecido, puedes escribir cada una o bien conversar con tu familia y expresarles las bendiciones que tienes en tu vida; durante esta época siempre hacemos un balance de las muchas bendiciones que tenemos en la vida y aunque estemos en duelo, este año no debería ser diferente.
Para finalizar no existe una forma correcta o incorrecta de celebrar la navidad, solo tu vas a decidir como hacerlo, con lo que tu y tu familia se sientan bien, debemos ser amables con nosotros mismos, recuerda que siempre hay ayuda disponible si te sientes cargado emocionalmente en estas fiestas, un psicólogo o un terapeuta especialista en duelo pueden ayudarte a procesar esta experiencia.